Sa Rapita

Moderno chalet para sentirse bien – a pocos pasos de la playa de ensueño Es Trenc

A tan solo unos minutos de las aguas turquesas de la famosa playa Es Trenc, se encuentra este chalet cuidadosamente renovado, ubicado en una zona absolutamente tranquila – un lugar para llegar, respirar y simplemente disfrutar. Construido originalmente en 1990, la vivienda fue completamente modernizada en 2022/23, incluyendo toda la instalación de fontanería y electricidad.

Sus aprox. 113 m² de superficie habitable, bañados por la luz natural, albergan 3 acogedores dormitorios y 2 baños de diseño moderno. El salón-comedor, abierto y con chimenea, se integra armoniosamente con la cocina americana, desde la cual se accede directamente a la soleada terraza orientada al sur. Otra terraza en la parte trasera fue transformada con mucho cariño en un jardín de invierno – el rincón ideal para cualquier época del año.

Gracias a la calefacción central de gas y el aire acondicionado en todas las estancias, el chalet es perfecto para vivir en él durante todo el año. El exterior ha sido diseñado para un fácil mantenimiento y está preparado para un sistema de riego automático. Un elegante y práctico piscina desmontable ofrece una refrescante escapada en los días calurosos.

Y lo mejor de todo: ¡se vende completamente amueblado! Llegar, entrar y empezar a vivir.

Sa Ràpita, en el sur de la isla de Mallorca, es un lugar donde el turismo masivo aún no ha llegado. Aquí no encontrarás grandes hoteles ni complejos. Tradicionalmente, los residentes de Palma venían a pasar sus veranos en este tranquilo rincón junto al mar – y muchos aún conservan sus casas de vacaciones para escapar del calor de la ciudad.

Incluso hoy, Sa Ràpita sigue siendo un lugar relajado, ideal para descansar, también en los meses de verano. Además de su encanto tranquilo, el pueblo cuenta con un bonito puerto deportivo y, por supuesto, con Es Trenc – una playa que fascina a todo el que la visita. Arena blanca, agua turquesa... no en vano la llaman la playa caribeña de Europa.

Con sus 5 km de longitud y hasta 35 m de ancho, la playa serpentea entre dunas naturales. En verano, recibe hasta 10.000 visitantes al día – y aun así, su belleza se mantiene intacta. Sa Ràpita ofrece pequeñas tiendas, una farmacia, varios bares y buenos restaurantes. Pasear junto al mar aquí, respirando el aire salado, es simplemente un sueño.